Continuamos nuestra serie exponiendo la apostasía del tiempo final. En esta primera parte estamos hablando de las tradiciones: la Navidad, Halloween, Día de los Muertos.

Pienso que no es un secreto para nadie que casi todas las iglesias del mundo, tanto las que dicen servir a Cristo como las que no creen en absoluto en Cristo y tienen muchos otros dioses, celebran muchas tradiciones en común. Algunas de las tradiciones de las que estaremos hablando son la Navidad, el Carnaval, Halloween, el Día de las Madres, el Día de los Santos y las Fiestas de Año Nuevo. En realidad, hay diversas fiestas en las que se honra al hombre, a la mujer en el mundo o a instituciones.

Fiestas en las que se celebran el Día de los Santos, el Día de la Virgen de Alta Gracia, de Guadalupe y así como muchos otros celebran en el mundo, el Día del Presidente, el Día de Martin Luther King, los cumpleaños, el Día de las Madres, el Día del Padre, el Día de San Valentín, el Día de la Pascua Florida, que aquí en Estados Unidos en inglés se le llama Easter. Y esto es solo por mencionar algunas de las celebraciones de las tradiciones.

Sé que este es un tema que para muchos resulta impactante, porque como parte de la cultura de casi todas las naciones, muchas de estas tradiciones, o todas, se celebran de manera tradicional y la mayoría las hemos celebrado desde que éramos niños, cuando aún no teníamos entendimiento. Sin embargo, les invito a no endurecer el corazón, porque se está hablando de algo que para ustedes y para el mundo es normal. Les invito en el amor de Cristo a que se den la oportunidad de leerme y luego mediten un poco como adultos. Reflexionen, racionalicen un poco y acudamos a la palabra de Dios para ver qué dice al respecto de estas celebraciones y observemos qué hay detrás.

Por razones de tiempo, en esta primera enseñanza me enfocaré principalmente en la Navidad. Primero, porque es la celebración actual y, segundo, porque no nos alcanzará el tiempo, ya que hay mucho que podemos compartir sobre la Navidad. Durante esta festividad, existen muchas costumbres y tradiciones, y hay ciertas cosas que se hacen como parte de la celebración de la Navidad.

¿Alguna vez se han preguntado de dónde salieron estas tradiciones? ¿De dónde vienen estas costumbres? Por ejemplo, el Árbol de Navidad, los Reyes Magos, Papá Noel. ¿Quién es Papá Noel? ¿De dónde surge Papá Noel? Los enanitos, los duendes, las luces, decorar el árbol, la fiesta, los bailes, la celebración con comida que se hace, las borracheras, los intercambios de regalos. ¿No se han preguntado alguna vez cuál es el origen de estas cosas? ¿Dónde se celebró por primera vez? ¿No se han preguntado si el Señor mandó que esto se hiciera, o si lo hizo el Señor, o si lo hicieron los discípulos? ¿Manda la palabra de Dios que lo hagamos? ¿Qué conexión tiene Santa con Jesucristo? Entre ese viejo barbón, Santa, y Satán, ¿qué tienen en común con Jesucristo?

O que se celebra supuestamente el nacimiento del Niño Jesús, y hasta el Niño Jesús se celebra. Agarran un muñequito y supuestamente lo ponen debajo de un altar, diciendo que ese es el Niño Jesús.

Quiero que ustedes, muchos de ustedes que son adultos y tienen hijos, se imaginen que su hijo o su hija, ya de 20, 30, 40 años, y ustedes de 50, 60 años, no sé, les diga: “Mami, Papi, te voy a celebrar hoy; voy a celebrar el Día del Niño Papi. Mira, este muñequito, Papi, que yo tengo aquí, este es tuyo. Te voy a hacer una fiesta, te voy a hacer una comida, vas a invitar a mis amigos, porque voy a celebrarte. Hoy es tu día, Papi, pero yo voy a celebrar este muñequito, voy a celebrar al Niño Papi”. O: “Mami, yo te voy a celebrar a ti en este día, pero yo voy a celebrar a la Niña Mami, y esta muñequita que tengo aquí te representa a ti, porque esta eres tú, Mami, ¿ok? Pero yo te voy a celebrar, tú te quedas por allá, quédate en tu cama acostada, porque yo te voy a celebrar, mientras con mis amistades vamos a comer, a beber, a bailar y a fornicar para celebrarte a ti en este día”.

¿No es una locura? ¿Qué pensarían ustedes si su hijo o su hija les dice: “Voy a celebrar a la Niña Mami, al Niño Papi”? ¿No le dirían ustedes: “Mira, muchacho, ¿cómo que me vas a celebrar a aquella niña? Yo no soy una niña, soy una mujer adulta, soy tu mamá?” O el papá le diría: “¿Cómo que me vas a celebrar al Niño Papi? Yo no soy ningún niño, yo soy un adulto”.

Pero ¿cuánto más el Señor? El Señor no tiene principio de días ni fin de años. Ciertamente, conforme a la carne, nació de una mujer y vino en forma de hombre, pero Él no es un niño. Él creció y está en su trono. Aunque vino por un momento en forma de hombre, creció y, a los treinta y tantos años, partió de regreso y ahora está sentado en su trono. Él no es un niño; no tiene principio de días ni fin de años.

Ustedes pueden empezar a reflexionar un poco, esto es como una burla. No solo hay maldad del diablo, sino que también es una burla. Él se burla de nuestra ignorancia. Porque, ¿a qué persona adulta le gustaría que la recuerden como un niño y que la celebren como un niño, y todavía con una caricatura de niño? Pero en este caso estamos hablando de alguien que es Santo, Verdadero, Incorruptible. Y Él dijo que no podemos comparar al Dios incorruptible con la semejanza de imágenes. El Señor no está complacido en absoluto con que lo celebremos con imágenes, como si Él fuera un hombre, como si el Incorruptible pudiera ser adorado con algo corruptible hecho por la mano del hombre, que hoy existe y mañana ya se deshace con el tiempo.

Que nació el “25 de diciembre”; eso es otra mentira. Si vamos a la palabra de Dios, no hay ninguna indicación de que el Señor nació el 25 de diciembre cuando vino en forma de hombre. No existe tal indicación, es un invento. Yo no voy a profundizar en las raíces de dónde surgieron esas tradiciones, de dónde provienen la vela y las luces y el árbol. La palabra sí habla de un árbol que los paganos decoran. Más tarde nos referiremos a ello, pero yo no voy a investigar de dónde surgieron cada una de las tradiciones que se practican, que son muchas de las cosas que se hacen, como el intercambio de regalos; muchas cosas que vamos a leer a continuación. Pero sí invito a cada uno de ustedes a que tomen notas y ustedes mismos busquen en Google.

En este tiempo donde la información está muy fácil de adquirir, ustedes van a Google y buscan de dónde salió, dónde se celebró por primera vez la Navidad, por ejemplo. Y empiezan a leer lo que aparezca. Luego busquen cuándo se celebró por primera vez lo del árbol, de dónde salió esa tradición, qué país, qué nación, cuándo, de dónde salió lo de intercambio del regalo de la Navidad, a qué se debe, de dónde nació, dónde surgió. También lo de la comida, lo de las bailaderas, lo de la fiesta, y muchas de las cosas que leeremos a continuación, que hacen algunas de las naciones. Y se van a dar cuenta que todo está relacionado a rituales antiguos, a diversas culturas y naciones, de aún de antes de la venida del Señor, que lo hacían para adorar a sus dioses.

Aquellos que no conocen al Dios verdadero hacían ciertos rituales para adorar a sus dioses, para apaciguar a sus dioses, para que les fuera bien al principio de la nueva temporada, para que el invierno no les fuera muy dañino, para que les fuera bien con la cosecha. Y este tipo de cosas la hacían con el propósito de supuestamente apaciguar a sus dioses, de traer buena suerte, y cierto es que muchas de esas cosas de la buena suerte. Yo me tomé el tiempo, un momento, y pedí a uno de los grupos de la iglesia que compartieran por favor qué tipo de rituales o qué tipo de tradiciones hacían en sus familias o en sus países. Y le voy a leer a continuación algunas de las cosas que ellos me compartieron.

Yo pienso que si ustedes también buscan por ustedes mismos de dónde salieron cada uno de estos tipos de rituales, cosas y tradiciones, pienso que todos se van a arrepentir, todos aquellos de ustedes que amen a Dios, que temen de Él y que saben que el Señor no tendrá por inocente al culpable; aquellos de ustedes que tienen entendimiento, que la idolatría es un pecado de muerte. Después de indagar un poquito, de buscar en Google, y de escuchar esta enseñanza, estoy seguro de que se van a arrepentir, y si ya celebraron la Navidad este año, va a ser la última que celebraron.

Yo les invito a aquellos de ustedes, aquellos de ustedes también que temen de Dios, hagan lo que yo; oren en privado, y digan: “Señor, yo quiero que tú me compartas si esta celebración verdaderamente es idolatría, si verdaderamente es abominable”. Porque yo le comparto en el amor de Dios, y con temor a Él, que estas celebraciones de Navidad, como todas las celebraciones del mundo, son abominables al Señor, hacia Él, y son idolatría, ustedes digan, oren en secreto, y digan: “Padre Celestial, yo te pido que Señor, si verdaderamente ese pastor está hablando mentira, y celebrar esos días a ti te gusta, muéstramelo, Señor, pero si a ti no te gusta Señor, muéstramelo también”.

Pero háganlo, háganlo con temor de Él, porque ustedes no quieren encontrarse en enemistad contra Dios, por ser idolatras. Y si lo hacen en secreto, se van a maravillar; el Señor es misericordioso. Él no quiere que nadie se pierda; es su deseo que todos lleguen al conocimiento de la verdad, y se aparten del mal. Oren en secreto, para otros.

 Algunos de ustedes son pastores, tienen ministerio, tienen una iglesia, y ya han avanzado, ya creen en la liberación. Hagan lo que yo he hecho; oren por sus ovejas. Oren ministrando liberación. Oren con respecto a la Navidad, que, si algún demonio ha entrado a ellos, a sus ovejas al celebrar la Navidad, oren: “Yo te ordeno que te manifiestes en el nombre de Jesucristo”, y se van a maravillar.

Yo le voy a compartir, que de mi parte yo lo he hecho, no ahora, de hace como cinco o seis años atrás. Muchas veces en esta temporada me he tomado días continuos, y he ministrado a muchas personas, tanto los que son de la iglesia, como personas que venían de otras iglesias. He orado por toda la contaminación recibida durante la Navidad, por celebrar esas tradiciones, por participar en esa fiesta. Y si les cuento y me pongo a nombrar el número de demonios que se han manifestado, creo que me tardaría mucho tiempo mencionándoles demonios, porque son muchísimos.

Desde muchas enfermedades, los demonios se han manifestado; los que ahora destruyen la familia. Que supuestamente dicen que es un tiempo familiar, pero lo que el diablo hace a través de celebrarla, es establecer maldiciones de destrucción de la familia. Hay muchas familias y personas que les he ministrado, y se manifiesta que la raíz de la destrucción familiar, de que todos están divididos y llenos de odio, es por la celebración de la Navidad. Entran demonios de destrucción familiar, problemas diversos de salud, problemas económicos, problemas en el matrimonio, problemas con los hijos. Demonios que afectan diferentes áreas de su vida, y lo más importante, que los separan de Dios; porque es idolatría, y la idolatría es pecado de muerte. Demonios que afectan diversas áreas de su vida, entran a través de la idolatría.

Yo le doy testimonio, he orado por muchísimas personas, a través de los años, y en muchísimos de ellos se han manifestado tantas cosas. A veces me he tardado horas con una sola persona ministrando al respecto, porque se manifiestan demonios y más demonios, que entraron por esa fiesta. Es un pacto con las tinieblas el que se hace.

Ahora bien, aquellos de ustedes que tienen fe y que tienen un ministerio, no me crean a mí, sino oren como yo lo he hecho; oren por sus ovejas, y si lo hacen, se van a maravillar si verdaderamente tienen unción. Porque hay muchos demonios detrás, al hacer eso han pactado sus iglesias completas, y todas las ovejas.

Es tiempo de arrepentirse. El Señor ha puesto un día con el que le juzgará a todos, él manda a todos los hombres que se arrepientan. Es tiempo de arrepentirse de la idolatría, es tiempo de apartarse de las tradiciones del mundo. Hay que hacer lo que el Señor manda en su palabra, y lo que él no manda, no hay que hacerlo.

Yo le pregunté a las ovejas de la iglesia, qué tipo de cosas hacen ellos en la Navidad. Y como en la iglesia hay personas de diversos países, ya que, aunque estamos físicamente en Texas, también es una iglesia en línea y hay personas de diferentes lugares.

Voy a leer algunas de las cosas que me compartieron, una persona dijo:

“Hacían lo de las uvas, lo de quemar cartas; quemaban cartas, lo de la carta a Nicolás, lo del arbolito, lo de regalos. Mi abuela materna, el 24 sacaba un muñeco de yeso, para que le dieran besos.”

Imagínese, parte de la celebración, es sacar un muñeco de yeso para darle besos, ¿qué es eso? ¿Qué es lo de quemar cartas a Nicolás? ¿Quién es Nicolás?, ¿qué tiene que ver Nicolás con Jesucristo?

Otra persona dice:

“Coronas de adviento. Hacen algo también con los calcetines colgados en la chimenea.”

Unos calcetines en la chimenea, supuestamente celebrando la Navidad.  Celebrando a Jesucristo haciendo un ritual de poner unos calcetines en la chimenea, ¿qué tiene que ver eso con Jesucristo?

Todo eso es muy claramente ocultismo, son rituales. “Los bastones de caramelo y los belenes que supuestamente representan el nacimiento del que no tiene principio de días ni fin de años”. Hacen cosas para representar a Dios, supuestamente el nacimiento de Dios, pero lo único que la palabra dice acerca del origen de Dios es que no tiene principio de días ni fin de años.

Imagínese, ahora quieren mostrar que nació el 25, como que Dios es un hombre. Uno de los falsos Jesús, de los muchos que ha venido al mundo, si nació un 25. Pienso que cada 25 de cada mes han nacido Jesús, pero de los Jesús del mundo; hombres. Pero el verdadero no tiene principio de días ni fin de años.

Dice una persona en Colombia:

“Se celebra comprar ropa interior amarilla para el hombre o la mujer, un ramo de uva y frutas y riegan arroz en toda la casa. Ponen canela para la prosperidad.”

¿Hay alguien que tenga entendimiento y que pueda entender que esto es brujería claramente? Alguien con un poquito de entendimiento.

Yo no creo que hay que ser muy espiritual para entender que estas cosas que están haciendo, que hacen las naciones, es brujería. Porque es un día al diablo, es un engaño diabólico. Cómo Satanás se burla de nosotros. ¡Despierten! ¿Cómo es que la iglesia está dormida? ¿Cómo es que un pastor ya con 5 o 10 años leyendo la palabra y supuestamente conociendo de Dios, todavía no puede entender que estas tradiciones y estas cosas que hacen las naciones son brujería? Son abominables ante el Dios verdadero.

También la suerte, ¿qué suerte?, ¿qué es la suerte? El Señor es el que bendice, la suerte viene del diablo, pero el que da la bendición es Jesucristo si guardamos su palabra. No tienen que ponerse los calzones al revés ni calzones amarillos, supuestamente para la suerte. Si queremos bendición tenemos que temer de Dios y apartarnos del pecado. El diablo es el que vino a robar. Hay que someterse a Dios en espíritu y verdad y reprender al diablo que es el ladrón que quiere destruir todo a los que no hacen estas cosas que él quiere que hagan. Porque al hacer estas cosas, estos rituales diabólicos, los que están pactando con él, le están dando su alma.

Otra persona dice:

“El abrazo de fin de año, la cena davideña, el último día con uvas, pan de jamón, pernil, hallacas, ensalada de gallina y un pescado frito para tener salud durante el año nuevo, el dulce de lechosa y cabello de ángel, un abrazo fuerte de fin de año familiar y amistad.”

Y que hay que comer ciertas cosas supuestamente para tener salud durante el año.  ¿No es Dios el que nos da la salud? ¿No dice la palabra, que, si uno guarda su palabra, él quitará todas las enfermedades de nosotros? Es el Señor el que nos sana. ¿Quieren salud? Arrepiéntanse del pecado y guarden su palabra.

Todas estas cosas son abominables, claramente son idolatría. Están poniendo la fe en lo equivocado. Quieren suerte sin guardar la palabra. Oh sí, yo voy a dar un paseíto con uvas y a tirar arroz en el piso para que me vaya bien; eso es brujería. Si quiero bendición verdadera sin maldición, tengo que venir a Cristo. Tengo que pedir al Señor, apartarme del pecado y guardar su palabra. Pero el querer bendición regando uvas o caminando o tirando arroz, eso es brujería; es un ritual diabólico. Por cosas como esas es que la ira de viene Dios sobre el mundo.

Dice otra persona:

“Una costumbre en esta fecha de Navidad, es en el 31 de diciembre a las 12 a.m. Queman un muñeco a tamaño de hombre al que le ponen camisa larga, pantalón y por dentro lo rellenan con ropa vieja o aserrín, le ponen bombas con pólvora y le ponen un cigarro en la boca y una botella de licor en la mano, y lo queman cuando dan las 12. Eso explota y se va al año viejo. Hasta una música tienen de esa costumbre.”

Imagínense, un muñeco en forma de hombre que le ponen un cigarro de la boca, le ponen licor y lo explotan y eso es parte de la celebración.

Para mí estas son cosas claramente para invocación al diablo. Aquí lo que están haciendo es llamar al diablo a que venga a bendecirle supuestamente para el año nuevo. Con todas estas cosas los que están llamando el diablo para que les venga supuestamente a proveer para el año que viene, con todas estas cosas lo que hacen las naciones, es que están entregando y pactando con el diablo a través de estas cosas y celebraciones. Y la familia también entregando la vida de sus hijos y la de ellos mismos al diablo al celebrar estas cosas, porque son rituales diabólicos.

Yo creo que hay que ser muy ciego espiritualmente, pues la verdad que el satanás se burla. Cómo los humanos podemos ser tan ignorantes. Cómo yo mismo era tan ignorante que participé en alguna de esas cosas. Cómo se es tan ciego, que uno no puede mirar que esto es abominable ante el Dios verdadero. Cómo uno no puede ver que esos son rituales de brujería. Hay que estar muy ciego para no mirar que estas cosas que son del diablo.

Otra persona dice:

“El Árbol de Navidad, se hacen aquí adornos navideños, se comparten regalos, cartas a Santa, etcétera.”

¿Quién es santa? Santa es Satán. Ese viejo barbón vestido de rojo; ese es Satán. Santa es Satán, es el diablo.  Supuestamente también le piden bendición a Santa Claus. Le piden bendición a Santa Claus. Ahora santa Claus es Jesucristo. ¿Quién dijo que santa Claus es Jesucristo? Santa es el diablo, el que engaña al mundo entero, es el mentiroso que se disfraza de ángel de luz y pone las cosas bonitas, para que pacten con él y lo reciban en sus casas.

“Pedir bendición a Santa y no a Jesús, la ropa y sus colores, comer uvas, brindar con bebidas, comida navideña, prender velas en la mesa, baile, parranda nocturna. Amanecerse sin dormir, y si uno se duerme antes de las 12 de la noche, supuestamente es maldición. Porque obviamente también sé es un aburrido o aburrida porque uno no se quedó la noche entera bebiendo. Fuegos artificiales, los pesebres e ídolos de barro, se hacen muchas imágenes paganas que son idolatría”, dice esa persona.

Otra persona dice:

“Durante la Navidad, poner un huevo en un vaso con agua debajo de la cama, para ver al otro día cómo va a ser ese año, según lo que se forme en el vaso.”

Poner un vaso de agua con un huevo, yo he escuchado algunos países que se dan limpieza con el huevo también. Ahora resulta que también con el huevo tú lo pones en agua y ya tú vas a ver cómo te va a ir el año que viene. Eso es brujería y adivinación, eso es muy claro. Alguien que diga conocer a Jesucristo y que aún no entienda que estos son rituales de brujería. Tan fuerte es el engaño del diablo aún en la iglesia, que no pueden notar que esto es brujería.

“Comerse 12 uvas pensando un deseo mientras se comía cada una de ellas”. Ahora resulta que la uva es el dios de la bendición. Con respecto a estas costumbres, lo que haces es que prácticamente te comes una uva en ese día, después te come las 12 y conforme a lo que tú pienses vas a crear la bendición. Conforme a lo que tú piensas y al comerte esa uva, esa uva va a ser una bendición para ti el año que viene. En pocas palabras, esa uva representa 12 dioses y cada uno de ellos reemplaza a Jesucristo. Y si tú le pides algo a esa uva, “esa uva te va a bendecir el año que viene, porque esa uva camina y te oye y esa uva tiene mucho poder, esa uva está sentada en su trono en el cielo. Cada una de esas uvas representa un trono allá arriba, que te va a bendecir si tú te las comes a esa hora”. Eso es brujería, eso es mentira, eso es engaño del diablo.

“Dar la vuelta a la manzana con una maleta”. Dar la vuelta a una manzana con una maleta… ¿Alguien piensa que eso es normal? Alguien que tema de Dios, que tenga un poquito de conocimiento de la palabra de Jesucristo y crea que dar una vuelta con una maleta para la suerte o para algo es normal, que no es brujería.

“Cargar en el bolsillo trigo y lentejas”. Estas son cosas supuestamente para tener suerte. Hasta en estas cosas de las uvas, del trigo, de las lentejas, ustedes pueden ir a la historia de dónde vienen estas tradiciones, y se van a dar cuenta que eran para honrar a los dioses de las cosechas. Ahora la gente no siembra mucho, pero de una manera u otra, esos mismos dioses que representaban esas cosechas, ahora representan frutas y cosas. Pues solamente le han cambiado un poco el enfoque, pero es la misma adoración a esos dioses.

“Frente a un espejo y con una vela encendida en un cuarto oscuro, observar que se iba formando a medianoche.” ¡Oh, una vela encendida en un cuarto oscuro! Eso ya me parece más claramente un ritual y ver qué se va formando en un cuarto oscuro con una vela encendida. Lo cual es una invocación a la falsa luz que Lucifer.

Otra cosa que hacían:

“Amanecer en el Año Nuevo con un billete del dólar dentro de la billetera.”

Un billete del dólar para tener suerte… ¿sabe que en el billete del dólar está el símbolo Iluminati, que es brujería? Está el “Ojo que todo lo ve”, que también es brujería.  Pura brujería en ese dólar, pero ahora resulta que por tener un dólar supuestamente vas a tener la bendición. Ahora el dios del dólar reemplaza al Dios verdadero también, y que ahora es el que te va a bendecir por tener un billete en el bolsillo; es puro engaño diabólico. A la verdad que Satanás es un mentiroso. Es un mentiroso y la verdad es que se burla de nuestra ingenuidad, desafortunadamente.

En verdad yo no quiero ofender a nadie, pero el diablo sí que nos ofende a todos. Cuando uno ha participado en esas cosas, el diablo se está burlando de nosotros.  Nos está llamando tontos, ingenuos y se burla. Yo imagino que ese diablo junto con sus demonios está carcajeándose del mundo, pues lo engaña para hacer tantas cosas tontas. Y todavía uno lo hace pensando que le va a ir bien, cuando uno está llamando al diablo; él que vino a robar, a matar y a destruir. Cuando uno invita al diablo al hacer esas cosas, lo que viene es a destruir, viene a destruir a sus hijos, viene a destruir su vida, su salud, sus finanzas, su matrimonio, su caminar con Dios y su alma, si no se arrepienten rápido.

Otra persona dice:

“También riegan lentejas por toda la casa, para la abundancia, para que por lo menos no les falte la comida. Si alguien se ha muerto, se reúnen muchos familiares, inflan un globo que lleva una carta adentro, para que el alma de la persona sea liberada.”

Inflan un globo, si alguien se murió en esos días, y tiran el globo para arriba, con una carta adentro, para que el alma de la persona sea liberada.

O también:

“Piden deseo, para que se les cumpla, y lanzan las bombas al aire, en medio de la noche, y la persona espera por su respuesta, de esa persona que ya se fue.”

Hacen un ritual a la persona que murió, le ponen un globo, primero para que el alma sea liberada, como que, si el perdón de los pecados viniera por inflar un globo, con una carta dentro, para hacer un ritual al diablo y ahora los pecados son perdonados. Pero entonces, la persona que ya se fue, ellos hacen el ritual, y esperan en la noche, para que esa persona que se fue les responda. Y eso es también otro pecado abominable ante Dios: el consultar los muertos y pedirles el favor a los muertos. ¿Alguien que no entienda que esto es brujería? ¿Alguien que tenga un poco de conocimiento de la palabra, y no mire que estos rituales son brujería?

Otra persona me dice:

“Acá en Venezuela, tienen por costumbre mandar a los niños a escribirle una carta a Santa Claus o a San Nicolás.”

Una carta a Santa Claus o a San Nicolás… “Para entregarle cuenta de que se han portado bien, y pedir el regalo. Eso lo hacen el 24 por la noche. El 21 hacen una comida, y le dan bienvenida al espíritu de la Navidad”. Le dan la bienvenida al espíritu de la Navidad… Al espíritu del diablo le están dando la bienvenida. Y a los niños lo ponen que le den cuenta, supuestamente a Santa Claus, de que se portaron bien. Al Señor Jesucristo, hay que dar cuenta, pero él no es ningún Santa Claus. Santa Claus es Satán, el diablo. Al Señor Jesucristo no hay que darle cuenta, porque él sabe todas las cosas.

Ciertamente él juzgará todo, pero todos tienen la oportunidad de arrepentirse. Ciertamente los padres que ponen a los hijos a que hagan estos rituales, que al hacer esto, están entregando a sus hijos al diablo, son los que le van a dar cuenta. Pero no le van a dar cuenta a Santa Claus, le van a dar cuenta a Jesucristo, si no se arrepienten. Y si no se arrepienten, van a ser encontrados culpables, y habrá lloros y crujidos de dientes, porque van a ir al lago de fuego. Eso es pecado de muerte.

No solamente están ellos pactando su alma con el diablo, al participar en esas cosas diabólicas, sino también le están entregando el alma de sus hijos al diablo, al hacer que sus hijos vayan supuestamente a hacer una carta a Santa, y a darle cuenta a Santa, por si se portaron bien. A Jesucristo es a quién daremos cuenta sobre si nos portamos bien o nos portamos mal. Y déjame decirte que todos nos hemos portado mal, solamente somos justificados si nos arrepentimos del pecado. Si no nos arrepentimos del pecado, si no se arrepienten de cosas como estas, todos son culpables.

Dice también la misma persona:

“Allá en Venezuela se ponen ropa de interior amarilla para la prosperidad, y comerse 12 uvas pidiendo un deseo por cada uva, comer a medianoche, explotar fuegos artificiales, y dar el Feliz Año, aparte de beber y exagerar en la comida, de hallacas, con de jamón panteón, vino y ponche de crema. También decoran con luces las calles, plazas públicas, y hacen lugares muy decorados, con túneles brillantes para tomarse fotografías. Casi siempre hay imágenes de fondo grandes de ídolos.”

La verdad es que, al leer estas cosas, se me entristece el corazón. ¿Cómo el diablo puede cegar el mundo entero tanto, que el mundo entero hace cosas como estas? Y no se dan cuenta, que son brujerías, que son abominables, que son pacto con las tinieblas. Que al hacer esto, ellos quieren bendición supuestamente. Cosas como estas para recibir bendición, pero no saben que lo que están trayendo es una maldición sobre su vida, y sobre sus hijos. Ese tipo de cosas que hacen en esas celebraciones, yo les comparto, que no solamente es una maldición sobre ustedes. Ese tipo de cosas traen una maldición generacional, al hacer cosas como estas, ustedes mismos se maldijeron, maldijeron a sus hijos, a sus nietos, a sus bisnietos, a sus generaciones. Por cosas como estas viene la ira de Dios.

Están buscando a la criatura, y a la creación, antes que al Creador. No solamente adoran a los animales, al árbol, hasta a la uva la adoran, hasta el arroz adoran. Imagínense el arroz, que uno se lo come, y luego va al baño. Y si uno no se lo come, se lo comen las aves. Y si no se lo come las aves a los 3 días se pudre, y ya se convirtió en tierra. Hasta el arroz adoran. Por cosas como esta es la ira de Dios.

¿Ustedes no pueden entender por qué todo esto es parte de la gran apostasía? ¿Algunos de ustedes pueden entender, que las iglesias, por mucho que digan conocer a Jesucristo, si celebran cosas como estas, están en apostasía, y son aborrecedores de Cristo? Yo sé que algunos de ustedes, son pastores, yo sé que los que me escuchan en los medios sociales son parte de muchas iglesias. Pero alguien con un entendimiento, que entienda, que no importa que tú quieras mucho a tu pastor, o que el pastor diga amar a Dios, y que diga muchas cosas, pero si hace cosas como estas, es abominable y están haciendo lo que es abominable ante Dios.

¿Ustedes no entienden, que si son parte de una iglesia, que hace estas cosas, son enemigos de Cristo? ¿Ustedes no pueden entender, que, si sus iglesias están celebrando estas cosas, están en amistad contra Dios? Son ciegos. Sí, yo sé que mis palabras no son agradables, nadie quiere escuchar que es ciego. Pero es mejor que tú me escuches ahora, y sepas que eres ciego, y que tienes que arrepentirte. Porque si no lo haces, el Señor te va a juzgar. Yo no juzgo a nadie, ni el mismo Señor vino a juzgar, pero dijo: “Tenemos, todos tenemos un juez, y esa es la palabra escrita”.  

Por la palabra que nos dio, seremos juzgados. Y él dijo que va a juzgar a los idólatras. La palabra dice claramente, que los idólatras tendrán parte en el lago de fuego. Yo no le estoy juzgando, le estoy confirmando, le estoy recordando, le estoy dando entendimiento de lo que le va a pasar a los que no se arrepientan de cosas como estas, porque es abominación ante Dios. Es abominable, y dice la palabra que es si un ciego guía a otro, ambos se caen en un hoyo.  Si ustedes están siendo parte de iglesias que celebran estas cosas, están siguiendo a los ciegos. Tienen que apartarse de esas iglesias. Por lo menos, compartir al pastor esta enseñanza. Sí, compártele a tu pastor esta enseñanza.

Yo sé que, a aquellos como yo, que compartimos la verdad, nos dicen que estamos llenos de odio, que aborrecemos a las personas. Yo no aborrezco a nadie; yo amo a tu pastor, y te amo a ti que me lees. Por eso les estoy compartiendo la verdad; porque no quiero que mueran, no quiero que se quemen en el lago de fuego. Si yo los aborreciera, no les diría la verdad. Si yo los aborreciera, no estaría aquí compartiéndoles la verdad, porque entonces yo sí soy aborrecido por decir la verdad. Pero yo les digo la verdad, aunque me aborrezcan, porque yo quiero que se salven.

Es el tiempo final, el Señor viene pronto, pero Él viene por una iglesia limpia, sin manchas, sin arrugas. Pero estas no son arrugas, estos son pecados de muerte. ¿Alguien puede entender que la idolatría es pecado de muerte? Porque la palabra lo dice. ¿Alguien puede entender que esos rituales son brujería? En el antiguo testamento dice la palabra:

«No dejarás con vida a la hechicera» (Éxodo 22:18).

En el antiguo testamento, esos serían pecados que matarían a la persona, incluso ahí mismo. En el antiguo testamento a los que hacían eso, los mataban, los apedreaban hasta la muerte. Ahora no nos apedrean hasta la muerte, pero los que no se arrepientan, van a recibir un castigo más grande que las pedradas; porque es peor ir al lago de fuego y quemarse por la eternidad que unas cuantas pedradas. El Señor no tendrá por inocente al culpable.

En la palabra nos habla del árbol de Navidad, mediten en ello. Está en Jeremías 10 del 1 al 5. Mediten en esta palabra: «Oíd la palabra que El Señor ha hablado sobre vosotros, oh casa de Israel. Así dijo El Señor: No aprendáis el camino de las naciones, ni de las señales del cielo tengáis temor, aunque las naciones las teman. Porque las costumbres de los pueblos son vanidad; porque leño del bosque cortaron, obra de manos de artífice con buril. Con plata y oro lo adornan…» ¿Alguien mira árboles adornados en este tiempo, que cortaron en el bosque? Muchos pinitos cortados del bosque, y los adornan muy bonito. 

El Señor les habla, para ustedes es esta palabra: «Con plata y oro lo adornan; con clavos y martillo lo afirman para que no se mueva. Derechos están como palmera, y no hablan; son llevados, porque no pueden andar. No tengáis temor de ellos, porque ni pueden hacer mal, ni para hacer bien tienen poder». El Señor le habla. Sí, agarran un leño, es una adoración. Ese árbol representa un ídolo, ese árbol también es abominable el Señor. Las iglesias que ponen ese árbol están celebrando a Satanás en sus iglesias. Las personas que van a esas iglesias también están poniéndose bajo el dominio de Satanás. Las iglesias que celebran la Navidad están en apostasía. Las iglesias que celebran la Navidad, si no se arrepienten, van a dar cuentas a Dios los pastores, por ellos y por las ovejas. Y las ovejas que siguen a estos pastores, van a crujir los dientes, si no se arrepienten, pues es pecado de muerte.

El diablo se disfraza como un ángel de luz, y él pone su maldad de una forma divertida; porque qué divertido es comer, beber, disfrutar supuestamente la vida, parrandear, que dar regalo que no es regalo, pura fiesta y parranda. Lo hace sentir todo muy bonito; músicas navideñas, etc. Pero si no se arrepienten, hay tormento eterno por cosas como esta, porque es idolatría, es celebración al diablo.

Levítico 20:22-23, dice:

«Guardad, pues, todos mis estatutos y todas mis ordenanzas, y ponedlos por obra, no sea que os vomite la tierra en la cual yo os introduzco para que habitéis en ella. Y no andéis en las prácticas de las naciones que yo echaré de delante de vosotros; porque ellos hicieron todas estas cosas, y los tuve en abominación.»

¿Qué dice la palabra aquí? Que no aprendamos la costumbre de la tierra donde habitemos, porque ellos hicieron estas cosas, y el Señor lo tuvo por abominable. Las costumbres de las naciones son abominables. Usted entiende que hasta en China se celebran muchas de estas cosas. En todos los países del mundo que no creen en Dios, celebran estas cosas. Los masones celebran la Navidad, los brugos celebran la Navidad, todo el mundo celebra la Navidad.

¿Qué tiene que ver la justicia con la injusticia? ¿Qué comunión hay entre Jesucristo y Belial? Si eso fuera de Dios no lo harían. Ellos no creen en Jesucristo, pero claro, en comer y en beber, y en celebrar a Satán, a Santa, y en adornar su casa con el árbol, claro que en eso si creen. Porque eso es del diablo, esas tradiciones son del diablo. Esas tradiciones son adoración a Satanás, pues el mundo adora lo suyo. El mundo participa; todo el mundo participa en estas cosas porque es del diablo, y lo que es del diablo el mundo hace. Lo que es del diablo el mundo no lo resiste, lo que es de Dios es lo que el mundo resiste. El mundo resiste una enseñanza como esta, porque pone la obra del diablo, pero lo que es del diablo recibe. Hay que arrepentirse, pues es apostasía.

¿Alguien puede entender a dónde vamos con esta enseñanza? Que aún con algo tan sencillo como esto, mostramos en gran manera la maldad que se atrae cuando la iglesia hace ciertas cosas, como cuando oran los pastores. Y yo le invito también, pues yo sé que hay pastores que quizás todavía por diferentes razones están un poquito rezagados, pero van a escuchar esta enseñanza, y van a entender mis palabras, porque el Señor está hablando a través de mí. Y quizás todavía no están ministrando liberación, porque le faltan muchas cosas. Pero yo estoy aquí disponible, tanto para ministrarles a cualquiera de ustedes que quieran salir de esos pactos que hicieron con Satanás a través de celebraciones, como a los que quieren que sus ovejas sean ministradas, estoy a su servicio.

Aquellos de ustedes que ministran, ministren sus ovejas, y compártanme sus testimonios. No va a ser nada nuevo para mí, pero sí interesante, porque sé que sus ojos van a ser abiertos. Si oran los que supuestamente tienen unción, oran por sus ovejas con respecto a la Navidad, se van a sorprender de todos los demonios que se van a manifestar. Se van a sorprender, son muchos más demonios, son muchos más pactos con el diablo, que se hacen a través de esa celebración, de lo que ustedes se pueden imaginar.

Colosenses 2:8, dice:

«Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.»

A través de estas cosas pasa lo que dice esta palabra; son cautivos. Cuando le abren la puerta al diablo, a través de celebrarle con árboles y con muchas cosas. No es un solo ritual, no es un solo pacto que transcurre en esa fecha, son muchos pactos. Cada cosa que hacen, desde el árbol, las luces, la comida, el vino, el baile, el abrazo y todo lo demás, son pactos diferentes, son muchas maldiciones sobre la familia. Esta palabra se cumple, Colosenses 2:8.

Cuando siguen los rudimentos del mundo, la filosofía de los hombres de que no pasa nada al celebrar la Navidad, porque es un día familiar y las mentiras del diablo, son cautivos. Porque muchos demonios entran y muchos demonios encadenan a la familia entera. También lo dice la palabra en Romanos 12:1-2, dice:

«Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.»

No hay que conformarse a las tradiciones, a los rudimentos de este mundo, estas cosas cuando uno nace en el mundo y uno está engañado y está esclavizado, es como que uno siente que es un pedazo de uno que le arrancan si uno no participa en ella.

Por la gracia de Dios, yo tengo ya siete años que no participo en esas fiestas, creo que son ocho ya. Ocho fiestas de Navidad que no participo ya, contando esta. Nada de esas cosas, y la verdad es que no, yo no he perdido nada. La verdad es que he ganado mucho, porque hasta en las finanzas, como ya no participo en esos regalos, pues no tengo que gastar dinero. Pues no tengo que estresarme aquí en la tienda a comprar cosas y que aquí y que allá, lo que me ha ahorrado mucho tiempo y dinero y tranquilidad y más tiempo para Cristo. Porque imagínese el tiempo que uno se gasta y tener que trabajar más adicional para pagar los regalos y todas esas cosas y el tiempo y bla, bla, bla. Esos son tiempos que he ganado durante estos años para Cristo, he ganado tiempo para Dios. Pero lo más importante que es que en vez de seguir pactando con el diablo y seguir maldiciéndome, lo que he caminado de las maldiciones, he tenido tiempo para ahora para orar, arrepentirme y romper cadenas que yo mismo me traje a mí mismo, por la idolatría, al participar en cosas como esas.

Y para concluir esta enseñanza, voy a leer Gálatas 4:8-11:

«Ciertamente, en otro tiempo, no conociendo a Dios, servíais a los que por naturaleza no son dioses; más ahora, conociendo a Dios, o más bien, siendo conocidos por Dios, ¿cómo es que os volvéis de nuevo a los débiles y pobres rudimentos, a los cuales os queréis volver a esclavizar? Guardáis los días…»

Ahora quieren guardar los días de Navidad, ¿porque se quieren esclavizar otra vez, si están buscando la libertad en el Señor? Guardar los días: el Día de la Madre, el Día del Padre. Guardan los meses, los tiempos y los años. Ahora que el día de qué sé yo, el Día de San Valentín. ¿Quién es San Valentín?, ¿quién es ese hombre? Que el día del amor, ¿qué tiene que ver San Valentín con el amor? Es un demonio. «Me temo de vosotros, que haya trabajado en vano con vosotros» Esto dice Dios a través de Pablo en la carta de los Gálatas, de que si ha trabajado en vano con ellos. Porque otra vez se querían volver a esclavizar, guardando los días, los meses y los años.

¿Alguien puede entender que, al celebrar estas cosas, al guardar esos días, los meses y los años y la cosa que celebra el mundo, se están poniendo bajo esclavitud? Bajo esclavitud del diablo, esto es parte de la gran apostasía. Para salir de la apostasía, que es de ese distanciamiento del verdadero Dios, hay que empezar a conocer la verdad, hay que arrepentirse de aquellas cosas que nos separan de él.

Es mi mayor deseo que esta enseñanza, aunque sé que no muy agradable para el oído, pero para el alma de mucha bendición. Yo espero que lo reciban como lo que es para el alma: como una bendición para aquellos de ustedes que la pueden escuchar y entender. Es mi deseo que sean bendecidos y bendecidas.

Lo que yo deseo es que sean libres. Lo que yo deseo es que se aparten del engaño del diablo. Lo que yo deseo es que formen parte de la iglesia del Señor, del tiempo final, porque su novia se prepara, porque el Señor viene pronto. Yo deseo que esta enseñanza sea un aporte, un granito de arena, para que ustedes empiecen ese proceso de limpieza espiritual, de quitar sus manchas. Espero que todos hayan sido edificados con ella.

Ahora nos tomaremos un tiempo, un momento, y vamos a orar en contra de estos mismos demonios que entran en la Navidad. Vamos a darle guerra a esos demonios de engaño, a esos demonios ladrones de alma, a esos demonios que buscan robar el alma de nuestros seres queridos, a través del engaño, haciendo que sean idólatras; sin saber que lo son, aun con cosas como estas.