Mandamientos de Jesucristo a sus Discípulos sobre el Amor #14

Bendiciones, les saluda el Pastor Francisco Gómez de la Iglesia Jesús Rey de Reyes. Hoy estamos continuando nuestra serie de enseñanza llamado a ser un discípulo. Estamos en la enseñanza número 14, mandamientos que el Señor Jesucristo dio a sus discípulos sobre el amor.

En esta enseñanza estamos hablando de un tema de lo más importante porque dice la palabra que no importa lo que demos o lo que hagamos, si no los hacemos en amor, pues nada es. Pero hoy estaremos hablando del amor un poquito en general porque estaremos hablando en diferente área del amor, pero mandamientos que el Señor dio acerca del amor, tanto de cómo mostramos el amor hacia Él, tanto de cómo hablaremos un poquito de cómo Él mostró su amor a nosotros, pero también del amor entre los hermanos, sobre el amor de una manera un poquito general, pero es un tema de mucha importancia, porque pues sin amor pues nada, nada es nada sin amor. En realidad, no podemos dar verdaderos y buenos frutos para el reino de los cielos si no tenemos amor, pero amor conforme a la palabra de Dios, muy importante porque hay más de un amor.

El amor del mundo no es igual que el amor a Dios, es una parte donde yo miro que el enemigo ha engañado, engaña a muchas personas prácticamente el mundo entero, especialmente en la misma familia. Yo he notado muchas veces en las damas, especialmente en las madres, de amor a sus hijos y a sus hijas, que a veces le aman, claro está, pero el amor está contaminado, un amor que viene con engaño, que está mezclado con el amor del mundo. Entonces cuando esa contaminación está, el enemigo logra que aún la misma madre dañen a sus hijos y a sus hijas, creyéndole proteger, queriéndole proteger, pero por el hecho de que el amor está contaminado, que no está conforme a la palabra de Dios, que no es el amor que Dios da, verdadero, el enemigo manipula para que prácticamente traumatiza a sus hijos y sus hijas de repente, sin darse cuenta.

Así hay que amar, pero hay que amar conforme a la palabra de Dios. Entonces hoy hablaremos del amor, vamos a mirar qué dice el Señor del amor.

En Juan 15:10, si guardaréis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, así como yo he guardado los mandamientos de mi padre y permanezco en su amor.

Aquí dicen, algunos dicen, no porque Dios, el amor de Dios es incondicional. Bueno, ciertamente desde un punto de vista, el amor de Dios es incondicional, o yo diría más que nada, su misericordia es incondicional, ya que como dice la palabra, el sol sale para los malos y los buenos, pero oiga qué dice la palabra, si guardaréis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, así como yo he guardado los mandamientos de mi padre y permanezco en su amor. En pocas palabras, si tú no guardas los mandamientos, no vas a permanecer en su amor.

Si tú no guardas los mandamientos de Dios, tú vas a permanecer en la ira de Dios. La ira de Dios está contra los que son desobedientes y rebeldes y viven una vida de pecado intencionalmente. Así que, si queremos permanecer en el amor de Dios, tenemos que guardar sus mandamientos.

Todo esto es importante entenderlo. Muchas personas no entienden esa parte y dicen palabras como, oh Dios es amor, Dios no va a mandar a nadie al lago de fuego. En pocas palabras, es como un engaño del diablo para que se justifiquen y pequen como no, no pecas, no pasa nada, Dios te ama, Dios es amor, Dios no va a mandar a nadie al lago de fuego.

Dios es muy bueno, si Dios es muy bueno, si lo es, pero Él es santo, Él es justo y en Él no hay oscuridad y Él no comparte con las tinieblas. Lo que son de las tinieblas van ahí donde van y las tinieblas si no son redimidos por Él. Primera de Juan 5, 3. Pues este es el amor de Dios, que guardemos sus mandamientos y sus mandamientos no son gravosos.

Una vez más, ¿cuál es el amor de Dios? Que guardemos sus mandamientos. Si verdaderamente le amamos, si uno dice Señor yo te amo, guarda sus mandamientos. Si no guardas su mandamiento, tú no le amas.

En la mente de la persona piensa que le puede amar a Dios a su manera, pero aquí el Señor está diciendo de la manera que Él considera que es el amor verdadero hacia Él. El que no hace lo que Él dice, Él dice que el tal es mentiroso. Gálatas 5: 22, 23.

Más el fruto del espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza. Contra tales cosas no hay ley. Uno de los frutos del espíritu es el amor.

Tenemos que buscar todos los frutos, pero ese en particular, ese que concierne a esa enseñanza y es uno de los mayores o es el mayor, el amor. Ese fruto lo deseamos, ese fruto tenemos que, si no lo sentimos en nuestro corazón tenemos que orar y pedirle al Señor. Juan 15: 13.

Nadie tiene mayor amor que éste, que uno ponga su vida por sus amigos. Aquí está enseñando el Señor mostrando ya un nivel más profundo del amor, porque Él mostró su amor hacia nosotros. Cuando aún nosotros siendo pecadores, rebeldes, desobedientes, Él dio su vida por nosotros.

¿Por qué la dio? Por amor. Para uno servir a Dios se necesita amor. Uno servir a Dios, apartarse del mundo como Él lo manda, ser su discípulo y vivir para servir a las personas, se requiere amor.

Si no amamos por amor conforme a Dios, porque si tenemos amor al mundo, amor a lo material, amor a las distracciones, no podemos hacer eso, no podemos servir a las personas. ¿Cómo vamos a invertir nuestro tiempo para servir a personas si podemos mejor servirnos a nosotros mismos? Se requiere amor, pero no amor propio, sino amor a los demás, un amor conforme a la palabra de Dios, para poder hacer la obra de Dios. Primera de Juan 4, 7 al 8. Amados, amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios.

Todo aquel que ama, es nacido de Dios y conoce a Dios. El que no ama, no ha conocido a Dios, porque Dios es amor. Aquí el amor, la palabra nos manda que amemos el uno al otro.

Si alguno no ama, es porque no conoce a Dios. Aunque no justifico a nadie, pero si voy a hacer un pequeño paréntesis. Por ejemplo, en este día estamos ministrando a muchas personas con trauma, con heridas del pasado, heridas de la niñez, herida a veces de adulto y adulta, y ocurre que, en alguno de esos casos, el corazón se endurece a causa de las heridas, a causa de lo que uno haya vivido.

Hay espíritu de dureza de corazón, y cuando eso pasa es como que el amor se apaga en uno, es como que ya uno se pone insensible. Entonces, más que nada un paréntesis, porque yo sé que algunos de ustedes van a decir pastor, pero yo no siento que tengo amores. Se van a sentir muy mal.

Ciertamente, si no sienten amores malos, hay que solucionar el problema. Uno de ellos, muchos de ustedes van a necesitar sanidad emocional, van a necesitar liberación. Por eso es importante ser parte de una iglesia donde se administre sanidad y liberación.

Pero, por otro lado, si no hay amor, puede haber otra razón, que verdaderamente haya habido un falso nacimiento, y el amor es de Dios, así como dice la palabra. El verdadero amor, porque ahí está, todo el mundo ama. Los homosexuales y los transvestis juzgan a nosotros, los discípulos, a los que conocen a Dios, de que no amamos.

Dicen, ustedes no aman, porque no aborrecen a nosotros. No le aborrecemos, aborrecemos el pecado, aborrecemos el engaño, no a la persona. Pero el diablo le hace creer que uno le aborrece a ello, que el hecho de que uno no lo acepta, o uno no acepta un matrimonio entre hombres, o un matrimonio entre mujeres, el diablo le hace creer que no amamos.

Se le hace creer que nosotros somos los que no tenemos amor, pero que ellos sí aman. Algunos piensan que Dios no ama, porque Dios no lo acepta lo que ellos hacen, pero que ellos sí aman, porque se aman el uno al otro. ¿Entienden? Ellos aman, pero es un amor diabólico, es un amor perverso, es un falso amor.

No es un amor verdadero. Dios es amor. Entonces, tenemos que estar alerta.

Queremos amar, por amar conforme a la palabra, amar conforme al Señor. Juan 13: 35. En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.

Esta palabra es muy importante. Cuando esta palabra, en realidad, pone al descubierto que las denominaciones, en realidad, no son discípulos del Señor. Porque dicen, estos amarán si son mis discípulos, si se amarán el uno con los otros.

Si tú miras, por ejemplo, lo pentecostales trinitario y los pentecostales unitarios, no se aman el uno al otro. Estos están exponiendo ahí mismo que no son discípulos, o por lo menos uno de los dos no son discípulos, o ninguno de los dos son discípulos. Porque los que somos verdaderamente discípulos de Jesucristo, debe de haber debe de haber amor en los unos por los otros.

En esto sabrán que son mis discípulos, si tuvierais amor los unos con los otros. Debe de haber amor, debe de haber amor. Estamos en guerra y el diablo es un ladrón.

Si ese diablo o ladrón roba hasta el amor. Por eso la liberación, una vez más, es importante. Hay que reprender todo espíritu de no amor, todo espíritu de robo de amor, todo espíritu de dureza de corazón, todo espíritu de en congelamiento del amor.

Y por ahí hay muchos más que entorpecen, que bloquean el amor. Pero es importante que todo lo que bloquea el amor se vaya. Porque el amor es uno de los frutos del Espíritu Santo y es uno de los frutos que confirma que somos verdaderos discípulos y es una de las cualidades necesarias para que todo lo demás que hagamos, los frutos sean buenos.

Porque si no lo hacemos en amor, las cosas no están bien. 2da de Tesalonicense, de 9 al 12. Sinigual, cuyo avenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos.

Por eso Dios lo envía a un poder engañoso, para que crean la mentira, a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia. Por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Aquí ustedes pueden entender, hay amor a la mentira, hay amor a la verdad.

El amor a la mentira es parte del falso amor, del amor que viene de las tinieblas. Los que tienen ese amor, si no se arrepienten, no se salvan. Pero dice, por cuanto no recibieron el amor por la verdad para ser salvos, para ser salvos tenemos que amar la verdad.

Y entonces, ¿qué dice la palabra a los que no aman la verdad? Que Dios le envía un poder engañoso para que crean la mentira, a fin de que sean condenados los que no creyeron a la verdad. Entonces, aquí esta palabra está fuerte, esta palabra está fuerte. Alguien puede comprender esa palabra, que, si uno no ama la verdad, si uno toma la ligera y la mentira, lo que venga, ah si ya, que bonito, yo lo recibo.

El Señor prácticamente le manda un poder engañoso para que sean condenados. Entonces, aún para ser salvos, ¿qué tenemos que hacer para ser salvos? Debemos de amar la verdad. Hoy hablaba con una dama que hizo una pregunta en nuestras reuniones virtuales y yo le compartí un poquito, porque hoy se manifestaron muchos demonios engañosos mientras yo ministraba a alguien.

Espíritu de falsa lengua, de falsos milagros, de falsas sanidades, de falsos dones, de falsas visiones, de falsa profecía, de falsas enseñanzas, falso pastorado, falso llamado, falso don de lengua, falsa luz, falso espíritu, y así se manifestaron muchos, todos ahí los que engañan. Y estaba, pastor, y ahora con todo esto, porque miró uno que vino con forma de luz y yo era en contra de ese, pero luego vino otro que parecía luz, haciéndose pasar por Jesucristo, lo miraron en visiones, y resulta que era Lucifer engañando. Pero yo le dije, porque como ahora soy yo, que todo lo que está pasando aquí es verdadero, cuando eso demonio trata de engañar tanto.

Entonces yo le dije que ciertamente el diablo trabaja fervientemente para que, para engañar, pero si buscamos, si ponemos todo, ponemos primero al Señor, primero amor a la verdad, es decir, no nos queremos una copia, si nuestro corazón estamos fervientemente buscando de Dios y mientras le buscamos Señor, no nos conformamos que se miran señales, que se miran prodigios, que se miran sanidades, que se miran visiones bonitas, que palabras proféticas, todo eso si viene de Dios es bueno y edifica, pero nosotros porque se mire bueno y bonito, no por eso lo aceptamos. Primero tenemos que nuestro corazón es siempre Señor, si esto que estoy mirando, esto que estoy escuchando, si estas visiones, si estos señales, si estos prodigios, si estas sanidades, si estas liberaciones vienen por tu espíritu Señor, muéstramelo porque yo la recibo, pero si no vienen de tu espíritu Señor, aunque se mire todo muy bonito y agradable, yo no lo quiero, porque es amar la verdad, cuando ponemos nuestro corazón, nuestro entendimiento, nuestro esfuerzo de esa manera, estamos diciendo en el espíritu, estamos diciendo yo amo la verdad, yo no quiero la mentira, Señor ten misericordia de mí, Señor yo no quiero algo porque se mire bonito o porque parezca que tú lo estás haciendo, yo quiero saber Señor que viene de ti, yo lo acepto y yo lo quiero si viene de ti, porque yo me someto a la voluntad del verdadero Dios, no de los impostores que se hacen pasar por Jesucristo. Tenemos que buscar de Dios, perseverar, pero siempre deseando nuestros corazones, sólo la verdad, no imitaciones, no copia, no mentira.

Efesios 4:14, para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por donde quiera, de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que, para engañar, emplean con astucia las artimañas del error, sino que, siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza de esto, Cristo. Siguiendo la verdad en amor, amor por la verdad, esa es la distinción, esa es la clave, eso es importante. Aquellos que aman la verdad, aquellos que, con humildad, con amor, con perseverancia, con paciencia, buscan de Dios, pero poniendo la verdad primero, no una doctrina, no un hombre, no un pastor, no una iglesia, es el Señor.

Queremos la verdad. Si donde el Señor nos lleva, si verdaderamente están buscando de él con todo corazón y en verdad, perfecto, lo recibimos todo. Pero si se vuelven por otros caminos, que no es de Dios, si no muestran ese amor por la verdad, si no están con humildad buscando de Dios, pues mejor tomamos otro, porque queremos la verdad, es la verdad que nos hace libres.

Si amamos la verdad y recibimos la verdad, somos salvos. No si recibimos doctrina de hombre, no, así no hay salvación. Si recibimos un poder engañoso y creemos en la mentira, que se dice la palabra, serán, van a ir al cielo lo que creen en la mentira, doctrinas torcidas, no, van a ser condenados, dice la palabra de Dios.

Es estrecho el camino que lleva a la salvación. Filipenses 3:7, pero cuantas cosas eran para mi ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo. Lo que era ganancia, lo estima como pérdida, ¿por qué? por amor a Cristo y eso se trata.

Aquellos que están dispuestos, así como Pablo, a tener todo por pérdida con tal de ganar a Cristo, porque aman al Señor sobre todas las cosas. Aquí él está diciendo en otra palabra, yo amo al Señor sobre todas las cosas y por él estoy dispuesto a dejar cosas, lo que para mí era valioso, lo he renunciado o estoy dispuesto a perderlo porque amo al Señor.

2da de Timoteo 2:10, por tanto, todo lo soporta por amor de los escogidos, para que ellos también obtengan la salvación que es en Cristo Jesús con gloria eterna.

1era de Juan 3:16, en esto hemos conocidos el amor, en que le puso su vida por nosotros, también nosotros debemos poner nuestra vida por los hermanos. En esto conocemos el amor, en que él dio su vida por nosotros, pero también nos manda la palabra aquí, que debemos hacer de nosotros, poner la vida por nuestros hermanos. En el tiempo final, que ya es éste, pues habrá persecución y habrá cosas.

Los hermanos, la familia compromete la carne, desafortunadamente algunos nos traicionarán y nos entregarán a la muerte, nos entregarán a la cárcel y nos aborrecerán y nos traicionarán, pero lo verdadero es amor en Cristo, nos amarán. Hace un tiempo atrás compartí esta palabra y una persona bien Jezabélica se enojó o bien influenciada por Jezabel, perdonen, pero muy muy muy caminando en ese espíritu, se enojó conmigo, nadie va a morir por nadie, eso es mentira, ningún hombre va a dar su vida por nadie, me quedo, esa persona empezó a mandarme mensaje, nadie va a morir por nadie, eso es mentira, pero yo le digo, el que no está dispuesto a morir por Dios, está muerto, aunque viva está muerto, si somos sus discípulos, esta palabra es verdadera y así como el Señor puso su vida por nosotros, si somos discípulos del Señor, estamos dispuestos a morir por Él y a morir por nuestros hermanos, ese es el amor en Cristo, en la carne no podemos hacer estas cosas, pero a través del Señor sí podemos y todavía lo hacemos como un gozo, lo hacemos con gozo.

2da de Corintios 12:15, y con el mayor placer gastaré lo mío y aún yo mismo me gastaré del todo por amor de vuestras almas, aunque amamos, aunque amando más, sea amado menos.

Aquí el apóstol está diciendo como él se gasta lo que tiene, se gasta su tiempo, se gasta, si me gasto yo mismo, dice él, ¿por qué lo hacía? por amor a las almas, si no hay amor por Dios, no se puede hacer servir a Dios, muchos pastores ahorita están ahí y nada más predican dos horas o tres días, no sé, dos o tres días por unas cuantas horas, pero no están dando su vida, no están ahí enfocado en liberar las ovejas, en sanarle, en pelear la batalla espiritual para que el reino de Dios avance, porque le hace falta amor de Dios todavía en sus corazones, le hace falta revelación porque si tenemos revelación y tenemos amor y miramos las almas encadenadas, de qué manera no, por lo menos haremos lo que podamos, no lo podemos hacer todo, pero hacemos lo que el Señor nos permite hacer, ¿por qué lo hacemos? por amor a las almas, si no hay amor a las almas, es un amor importante tener, yo diría que sin ese amor no podemos dar frutos, especialmente lo que tenemos un ministerio, ¿de qué manera podemos dar fruto en una iglesia? ¿de qué manera podemos ser verdaderamente útiles para el Señor si no amamos las almas? es un amor importante, el amor a las almas para dar fruto.

1era de Corintios 16:14, todas vuestras cosas sean hechas con amor, aquí nos manda la palabra que todo lo que hagamos, lo hagamos con amor.

Romanos 12:9, el amor sea sin fingimiento, aborrecer lo malo, seguir lo bueno, ese es el amor, el amor de Dios también es aborrecer lo malo, entonces estas son de las cosas que el mundo no entiende y luego nos juzgan erróneamente, no, porque si ustedes amaran, ustedes no criticarían a los católicos, por ejemplo, no se trata de criticar a los católicos, si ustedes amaran, ustedes no criticarían a los testigos de Jehová o cualquiera de las muchas denominaciones falsas, si le amamos en realidad tenemos que corregirlos, el amor del mundo, el amor de la tinieblas diría, no exponga la mentira, en pocas palabras no corrija al que está en error, se llama amor de la tinieblas, eso se llama no exponer la maldad, eso no es amor, no es conforme el amor en Cristo, porque si no expongo la maldad, pues entonces me estoy haciendo partícipe del mal, como le amo a ellos y si miro que están en error y que van a ir al lago de fuego por el engaño, que van a estar condenados por no haber recibido la verdad, de qué manera le amamos si no exponemos que están errados, pero el que le corrige, el que le dice mira, esto que tú crees, yo sé que lo hace porque tú crees estar correcto o correcta, pero está engañado, este camino en realidad, aunque se mira bonito, no es el camino estrecho, lleva la perdición, es el camino ancho, el que hace esto con amor, el que hace esto es porque está mostrando amor, porque puede salvar el alma de esa persona que está en engaño, el amor verdadero aborrece lo malo y defiende lo bueno.

Tito 2:2, que los ancianos sean sobrios, serios, prudentes, sanos en la fe, en el amor, en la paciencia, una vez más el amor, que sean sanos en el amor, soy el amor.

Gálatas 5:13, porque vosotros hermanos a libertad fuisteis llamados, solamente que no utilicéis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros, servíos por amor, esa tiene que ser la razón, la razón única y verdadera para servir en la iglesia, amor a Dios, primeramente, amor a las almas, amor a los hermanos y a las hermanas. Efesios 4:1, yo pues preso en el señor os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, con toda humildad y paciencia y mansedumbre, soportando los unos a los otros como en amor.

Si hay amor por las almas y con esas otras hermosas virtudes, la humildad, la mansedumbre, la paciencia, podemos vencer aún con las contradicciones que el enemigo pone para causar divisiones, con paciencia y amor vencemos.

Gálatas 5:6, porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor, la fe obra por el amor, la salvación viene a través del amor, del amor con que Cristo nos amó a nosotros y nosotros recibimos esa salvación si amamos la verdad que es su palabra, amamos lo que él hizo y lo que nos dice en su palabra, el amor es necesario para ser verdaderamente salvos.

1era de Timoteo 6: 10 al 11, porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos se extraviaron de la fe y fueron traspasados de muchos dolores, más tú hombre de Dios huye de estas cosas y sigue la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre.

Aquí está hablando de otro amor, es uno de los amores que es improductivo, que trae muerte, el amor al dinero, dice la palabra que el amor al dinero es la raíz de todo lo malo, el amor a lo sexual es causa de muchos pecados, el amor a lo material, muchos venden su vida, venden su alma, venden su cuerpo, venden drogas, matan, ¿por qué? por amor al dinero, el amor al dinero es la raíz de todo lo malo, mucho matrimonio se destruye porque si uno de los dos ama el dinero, hay maldad, mucha maldad, donde hay amor al dinero está todo tipo de mal, entonces el amor es amor, pero no queremos ese amor, es que hay muchos tipos de amor, el amor de Dios es el que queremos, el amor de Dios trae vida y vida en abundancia, pero el amor del mundo, los diferentes tipos de amores que vienen de las tinieblas, que hay muchos, traen maldad, traen división, traen oposición, traen persecución a los discípulos, el amor al mundo.

Colosenses 3:13, soportándoos unos a otros y perdonándoos unos a otros, si alguno tuviera queja contra otro, de la misma manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros, y sobre todas estas cosas vestidos de amor, que es el vínculo perfecto, ese vínculo es lo que une a uno en la perfección, para que haya una verdadera unidad, una verdadera hermandad en la iglesia, que debe de haber amor, el amor es el vínculo perfecto.

1era de Tesalonicense 1:5, pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros, aquí el apóstol está diciendo que su evangelio no llegó solamente con palabras, sino también con poder en el Espíritu Santo, y por qué llegaron ellos a ese lugar, por amor de ellos, el amor esa es la razón, ese es el combustible que tiene que impulsar nuestras vidas, para servir a Cristo y para hacer las cosas, si lo que hacemos lo hacemos por amor a Dios, por amor a las almas, entonces los frutos serán buenos y no tendremos nada de qué avergonzarnos a la venida del Señor.

1era de Tesalonicense 5: 8, pero nosotros que somos del día, seamos sobrios, habiéndonos vestido con la coraza de fe y de amor, y con la esperanza de salvación como yelmo, vestido de la coraza de fe y amor, el amor es una coraza, es como una protección, es como un escudo que nos protege, el amor, el amor a la verdad para recibir aún la armadura de Dios completamente necesitamos amar, el amor es parte de ese eje que nos ayuda a recibir y a estar protegido en el Espíritu.

Romano 13:10, el amor no hace mal al prójimo, así que el cumplimiento de la ley es el amor, por eso dice la palabra que el que ama a su prójimo ha cumplido la ley, por aquí no lo dice de otra manera y no lo explica, el amor no hace mal al prójimo, así que el cumplimiento de la ley es el amor, en pocas palabras la ley que Dios dio a través de Moisés, era con el propósito de no hacer mal al prójimo, por eso dice que ya no estamos bajo la ley, porque ahora el amor de Dios no ha sido mostrado de otra manera y a través de su Espíritu Santo, si lo recibimos y nos arrepentimos del pecado, entonces el amar al prójimo es el cumplimiento de la ley, porque si verdaderamente ya nos arrepentimos del pecado, si conocemos al Señor, si lo recibimos, pues ya no buscaremos hacer el mal al prójimo, por lo tanto ya cumplimos la ley.

1era de Corintios 13: 1 al 13, si yo hablase lenguas humanas y angélicas y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o símbolo que retiñe, y si tuviese profecía y entendiese todos los misterios y toda la ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes y no tengo amor, nada soy, y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si integrase mi cuerpo para ser quemado y no tengo amor, de nada me sirve, el amor es sufrido, es benigno, el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece, no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor, no se goza de la injusticia, más se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta, el amor nunca deja de ser, pero las profecías se acabarán y se cerrarán las lenguas, y la ciencia acabará, porque en parte conocemos y en parte profetizamos, más cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará. Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño, más cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño, ahora vemos por espejo, oscuramente, más entonces veremos cara a cara, ahora conozco en parte, pero entonces conoceré como fui conocido, y ahora permanece en la fe, la esperanza y el amor, estos tres, pero la mayor de ellos es el amor.

Aquí este este capítulo no habla del amor, muy precioso este capítulo, pero dice que luego permanecerán la fe, la esperanza y el amor, pero el mayor de ellos es el amor. Aquí no dice como si hacemos muchas cosas, hacemos el bien, porque si le damos al pobre, si vendemos todo lo que tenemos para darle a los pobres, y aún somos capaces de morir, quizá por el señor, si tenemos dones, si hacemos muchas cosas, si lo hacemos sin amor, nada es, en pocas palabras, si queremos que lo que hacemos, sea recibido de Dios, nuestros sacrificios, nuestro servicio, lo que hagamos, ayunemos, oremos, ofrendamos, oramos, leemos la palabra, buscamos evangelizar, buscamos servir como podamos, para ser útiles, para el avance del reino de los cielos, dice la palabra que si hacemos todas estas cosas, pero no lo hacemos en amor, no estamos haciendo nada, entonces es una de las virtudes, uno de los frutos del Espíritu Santo, que debemos buscar con fervor, debemos decir, señor Escudriña, mi corazón, si no hay amor verdadero, señor, por favor, ten misericordia de mí, perdóname, libérame, ayúdame, guíame, deseo ser libre, señor, yo quiero tener ese amor en mi corazón, como a ti te agrada, porque prácticamente todo depende del amor, si no tenemos amor, los frutos que damos son malos, entonces el amor es indispensable, para que demos frutos dignos de ser recibido por nuestro Creador.

1era de Pedro 4:7 al 8, más el fin de todas las cosas se acerca, sed pues sobrios y velad en oración, y ante todo, tened entre vosotros ferviente amor, porque el amor cubrirá multitud de pecados, sobre todo, tened con vosotros ferviente amor, el amor cubrirá multitud de pecados, no solamente el amor es necesario para nosotros servir y ser bendición, pero todavía con amor podemos ser útiles, para que de repente los pecados de otros puedan ser cubiertos y otras almas salven.

1era de Juan 4:16, y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros, Dios es amor, y el que permanece en amor permanece en Dios y Dios en él, el que permanece en amor permanece en Dios y Dios en él, el amor es como esa no ayuda, esa evidencia que ayuda a comprender y a entender, a reafirmar que estamos en él y que él está en nosotros, el amor.

Filipenses 1:9, y esto pido en oración, que vuestro amor abunde aún más y más en ciencia y en todo conocimiento, que vuestro amor abunde, aquí el apóstol ora que esa es su oración para con todos, y yo para concluir esta enseñanza, también es mi oración y mi petición para todos los que me escuchan, que el amor de Dios sea firme y crezca y permanezca en sus corazones, que aprendan a amar todo lo que Dios ama y aborrecer lo que Dios aborrece, que su amor sea perfeccionado, que su amor sea grato delante de los ojos de Dios, que el Señor les muestre a amar conforme a su voluntad, no conforme al mundo, gracias por escucharme, que el Señor les bendiga, hasta la próxima.